Libro
La obra empezó a ser escrita un día, algo más en serio, de los muchos diarios que había escrito. Fue construyendo el hilo conductor que intercalaba mi vida con la vida de tantas mujeres que han compartido momentos conmigo y vi el núcleo gordiano en el que todas las mujeres nos encontrábamos siempre: necesitadas de contarnos, de confesarnos, de desahogarnos de nosotras mismas, de los momentos de nuestras vidas – alegres, inquietos, cercanos, de risas y disfrutones, pero también de los tristes, los llorados, los lejanos, los arrepentidos, los que duelen a rabiar…
La vida pasa de manera parecida para todas, somos hijas, hermanas, amigas, madres, tías, novias, esposas, amantes… y todas queremos ser amadas sin quiebras, sin fracturas, sin engaños, que nos presten atención, casi diría sin reglas…en este mundo donde necesitamos a los hombres en nuestra vida – nuestros padres, hermanos, novios, amigos, jefes, hijos… - casi perseguidos por las corrientes políticas que están de actualidad y donde, algunas veces, sigue siendo la sociedad femenina y masculina la encargada de moldearte, forjarte, juzgarte y prepararte para que – un buen día – constantes que tienes alas poderosas para afrontar lo que la vida te depara.
Mi primera obra es un desnudarme ante ti, es mi vulnerabilidad para mostrar mi fortaleza, es mi vida mezclada con la tuya, es la tuya contada por mí y pretender ser el compromiso de todas las mujeres – con nombre propio en la obra – y todos los hombres que tenemos en nuestras vidas, porque sólo juntos podremos ser mejores.
Música y danza acompañan muchos momentos del libro, porque el baile es mi vida y la forma de expresión de la superación, la libertad, el liderazgo, la fuerza, la visibilidad junto con la vulnerabilidad que hace fuerte a las personas capaces de levantarse una y otra vez, con alas poderosas como los brazos de las bailarinas.